Título: Star Wars The High Republic nº1: El miedo existe
Autores: Guion de Cavan Scott y arte de Ario Anindito
Traductor: Víctor Manuel García de Isusi
Editorial: Planeta Cómic
Año de edición: 2021
Encuadernación: Tapa dura
Extensión: 136 páginas
Precio: 16,95 euros (papel)
La nueva era galáctica de Star Wars, que nos lleva unos 200 años antes de los sucesos vistos en La amenaza fantasma, llega ahora al formato cómic con su primer tomo recopilatorio. Este periodo histórico de la galaxia, explorado a través de novelas y cómics interconectados, nos lleva a la edad dorada de la Orden Jedi y la expansión de la República Galáctica a la peligrosa e inestable frontera del Borde Exterior. Una época que no por ello está completamente libre de amenazas, ya que los peligrosos Nihil y los voraces drengir están al acecho para ponerle las cosas difíciles a los guardianes de la paz y la justicia.
Hay que señalar que los sucesos de este tomo nº 1 de The High Republic (intitulado `El miedo no existe´) transcurren después de la novela Luz de los Jedi, de Charles Soule (cuya reseña podéis leer aquí), pero que funciona de forma completamente independiente. La protagonista principal es la joven jedi Keeve Trennis, que en un lejano planeta de la frontera galáctica se enfrenta a la prueba final que decidirá si puede ser aceptada como caballera de pleno derecho. Junto a ella se encuentra su maestro Sskeer, un trandoshano que se enfrenta a su propia crisis, después del primer enfrentamiento de los Jedi contra los Nihil.
LA ALTA REPÚBLICA
La historia de los cinco números que componen El miedo no existe llevará a ambos jedis a poner sus habilidades al servicio de los habitantes del peligroso Borde Exterior, tratando de desentrañar el enigma de una nave abandonada en el espacio y que parece haber sufrido un extraño ataque. Esta era de la Alta República nos presenta a unos jedis que viven su época más gloriosa, y que son capaces de demostrar sus increíbles habilidades y poderes, una conexión directa y firme con la Fuerza gracias a la cual derrotan a sus enemigos y ayudan a los desamparados. Sin embargo, sus asombrosas capacidades no los libran de sufrir sus propios conflictos internos, desde las constantes dudas de Keeve sobre si estará a la altura como jedi, a un Sskeer que trata de seguir adelante luchando contra su propia oscuridad interna. Y aunque los Sith han desaparecido de la galaxia (o eso creen todos), esta sigue repleta de gente deseosa de oprimir o explotar a los más humildes y desfavorecidos.
Frente a novelas como la ya mencionada Luz de los Jedi, donde los Nihil actúan como principal amenaza para sus protagonistas, en esta serie de cómics vemos la otra gran amenaza para la Alta República: los drengir. Unas criaturas sintientes mitad vegetal mitad animal, con una mente colmena, deseosas de saciarse de carne y de expandirse por la galaxia… como ya lo hicieron antaño. Su papel le otorga a la historia momentos de misterio y terror, acercando Star Wars a la temática de los zombis y las infecciones. El lector que sienta curiosidad por ellos puede encontrar más detalles sobre sus orígenes en la recomendable novela En la oscuridad de Claudia Gray (cuya reseña tenéis por aquí), que complementa lo que se nos cuenta en estos primeros cómics que componen El miedo no existe.
MAESTRO Y APRENDIZ
Sin duda, lo que más seduce de este tomo (más allá de su nueva ambientación) es la peculiar pero cercana relación entre padawan y maestro. Ambos jedis se ganan el cariño del lector, complementándose con sus personalidades casi contrapuestas. Una Keeve muy humana y cercana, repleta de dudas sobre sus capacidades pero que nunca titubea a la hora de poner su sable y sus habilidades al servicio de los necesitados. A su lado se encuentra el trandoshano Sskeer, un amenazante y sombrío Jedi cuyo pasado hará que el lector lo mire con una mezcla de interés y desconfianza, tratando de comprender la ordalía a la que se está enfrentando.A través del punto de vista de Keeve seguiremos a los jedis en sus papeles de protectores, investigadores y guerreros, uniendo sus fuerzas y actuando como un todo en defensa de la galaxia y sus habitantes. Y es que por esta historia deambulan otros personajes importantes de esta Alta República: ya sean más principales, como la maestra Avar Kriss (recién elegida capitán del Faro Starlight) o algunos otros en papeles más secundarios como los maestros Estala Maru o incluso el cameo del insigne Yoda; con la intervención de la singular pareja de Jedis formada por los gemelos Terec y Ceret, o las apariciones de señores del crimen Hutt, colonos de mundos lejanos o diversas (y amenazantes) criaturas del bestiario galáctico.
Una era más brillante que nos llega con el uso de colores luminosos y claros, tanto para los ropajes de los jedis como para sus naves y edificios, y un dibujo cuidado, de alta calidad plástica, a cargo de Ario Anindito. El guion de Cavan Scott cumple, manteniendo un ágil equilibrio entre acción e información, aunque nos despide con un final demasiado brusco, con la historia en su momento más interesante para que el lector desee continuar las andanzas de Keeve y sus compañeros, y que esperemos que Planeta Cómic nos traiga pronto.
Complementan este primer tomo, a su final, algunos de los bocetos originales de los nuevos personajes, lugares y naves de esta era galáctica, que permiten al lector acercarse a la creación visual de la Alta República.
EL MIEDO NO EXISTE: CONCLUSIONES
La nueva serie regular The High Republic nos lleva a una galaxia muy, muy lejana para mostrarnos la edad dorada de los jedi y la República. La expansión por los peligrosos mundos del Borde Exterior permite presentarnos a estos nuevos protagonistas que juegan sus papeles de protectores y guerreros, tratando de llevar la justicia a los peligrosos mundos de la frontera galáctica. Personajes que, a pesar de ser jedis de una edad gloriosa, tienen que enfrentarse a sus propios dilemas y luchas internas mientras tratan de resolver un enigma que involucra a colonos desaparecidos, señores del crimen Hutt y a unas voraces plantas carnívoras. En El miedo no existe, Cavan Scott mezcla la aventura, el misterio, el horror de tono más ligero y la acción, siempre con el sabor a Star Wars pero con la suficiente frescura para recordarnos que la Alta República nos lleva a una galaxia muy diferente a la que conocemos. Todo ello gracias al elegante y cuidado arte de Ario Anindito, que nos deja una acción sumamente bien resuelta y con detalladas viñetas que nos permiten disfrutar de esta era más luminosa y colorida, pero no por ello libre del todo de la amenaza de la oscuridad y la muerte.
