Escritor castellano, nacido en Palencia en 1978, Javier Font es un lector empedernido, amante a partes iguales de la literatura criminal, la fantasía y la ciencia ficción. Javier ha recibido varios reconocimientos por sus cuentos, en el XII festival Fernando Quiñones de Ayto de Cádiz y en el XIV festival de cuentos ilustrados de la Diputación de Badajoz.
1. ¿Quién es Javier Font y qué le hizo empezar a escribir?
Empieza potente la entrevista, supongo que la contestación de esa pregunta ―la de quién es uno mismo―, es responsable de buena parte de las mejores obras de la literatura universal desde tiempo inmemorial, así que no esperéis una contestación a la altura. Supongo que soy un tipo normal, alguien de ciencias al que un día le dio por las letras, escritor a tiempo parcial y lector empedernido, que se acerca peligrosamente a las cuarenta primaveras y que comenzó a juntar palabras tarde, más o menos hace quince años, cuando comencé a darme cuenta de que esto de la vida iba en serio.
2. Tu relato publicado en Windumanoth, Los dioses idiotas, trata sobre una Inteligencia Artificial llamada Eva. ¿Cómo se te ocurrió la idea? ¿Qué buscabas transmitir?
Hablar sobre inteligencia artificial hoy en día es sencillo, quizás porque vivimos un alumbramiento, un parto, ha llegado un nuevo niño a este mundo y todo el mundo está contento. Tenemos frente a nosotros una criatura bella y regordeta que aún no sabe hacer demasiadas cosas pero que aprende rápido. Mi imaginación como escritor ha ido un poco más allá, pronto las Inteligencias Artificiales inevitablemente abandonarán su infancia y entrarán en la adolescencia. Entonces, como padres responsables, tendremos que afrontar su educación. Estoy hablando no solo de hacerles distinguir el bien del mal, sino sobre todo hacerles enfrentarse a nuestras propias miserias, a nuestras incongruencias, a lo más oscuro de la condición humana. Puede que si las IAs son suficientemente listas quizás no tengan muchas ganas de parecerse a sus progenitores.
3. ¿Esta ha sido tu primera incursión en la literatura de género? ¿Es una excepción en tu carrera o tienes planes de seguir escribiendo fantasía, ci-fi o terror?
No, en absoluto. Adoro la literatura de género y lo cierto es que cada día me encuentro más cómodo con ella, aunque siempre desde una perspectiva realista y elegante, me encanta disfrazar la realidad de ciencia ficción, de fantasía y de terror. Intentaré seguir por ese camino hasta que el cuerpo y la mente aguanten, o hasta que me aburra, que también es posible.
4. ¿Qué otras obras de Javier Font podemos encontrar en el mercado? ¿Y en proyecto?
La primera obra que autopubliqué, No quedan hombres justos en Sodoma, es una novela corta de temática negra y rural con un toque muy sutil de fantasía. Una historia violenta, sobre lo que ocurre en el purgatorio cuando acercas una cerilla encendida a un bidón de gasolina. Es mi niña bonita, mi “ópera prima”, una obra inspirada a medias por dos de mis escritores favoritos. Delibes y Jim Thompson.
La segunda obra Alma 2.718 es ci/fi distópica pura y dura. Ciberpunk y cañera. Algo escrito con el cuchillo entre los dientes. En su día la publicó la extinta Grieta Editorial con desastroso resultado, recientemente he recuperado los derechos de ese libro y lo he reeditado, con nuevo diseño de portada y nueva corrección, todo ello está a tiro de clic en Amazon, por si a alguien le interesa.
Entre medias he escrito bastantes cuentos, tocando todos los palos, algunos de esos relatos están publicados en una antología llamada Crónicas del vacío otros desperdigados por el mundo cruel, en ediciones no venales de premios literarios, en blogs como Mundo Miscible o en la revista literaria Libros Prohibidos.
En cuanto a mis proyectos tengo una novela acabada pero no corregida, su título es Huero y básicamente estoy juntando fuerzas para afrontar el despiece que llega tras las lecturas beta. También hay un cuento aceptado por una revista con la que me hace mucha ilusión colaborar y algunos otros relatos que están buscando su hueco fuera del cajón.
5. Desde 2008 gestionas el blog Mundo Miscible. ¿Querrías hablarnos un poco de ello?
Soy suficientemente viejo como para haber vivido esto de internet desde antes de las sacrosantas redes sociales, y en mi caso, el blog Mundo Miscible (que empezó llamándose Cualquier tiempo dormido) fue sin duda el germen de mi condición de escritor. La idea era simple, escribir y publicar relatos breves novelados y relacionados con alguna curiosidad histórica. Un entrenamiento excelente que no siempre funcionó, y que con el tiempo evolucionó hacia un blog de reseñas de los libros, las películas y las series que me voy encontrando por el camino.
6. ¿Nos recomiendas un libro de género?
Hace poco colaboré con la revista Libros Prohibidos y su premio literario Guillermo de Baskerville, motivo por el cual cayeron en mis manos dos antologías que me encantaron; Bienvenidos al bizarro, De Orcinypress y Dark Fantasies de Sportula Editorial. Ambas muy sorprendentes.
Pero si sólo pudiera recomendar un autor, sin duda sería Ken Liu porque él está jugando en otra liga, su Zoo de papel es el mejor libro que he leído en mucho tiempo.