Título: La Primera y última nieve
Autor: Max Gladstone
Editorial: Planeta
Año de edición: 2019
Extensión: 544 páginas
Encuardernación: Tapa dura con sobrecubierta
Precio: 19,90 €
La primera y la última nieve de Max Gladstone es la primera de una larga saga conocida como The Craft Sequence que es todo un éxito entre los amantes de la fantasía y la ciencia ficción. Aunque parezca algo sobada, esta combinación funciona a la perfección en la obra de Gladstone.
La primera y la última nieve es, en realidad, una precuela a la que sería la primera novela de la Craft Sequence, Two Serpents Rise. En ella nos enfrentamos a los hechos ocurridos en Dressidiel Lex una ciudad gobernada por un hechicero esqueleto llamando El Rey de Rojo que, años atrás, derrotó a los dioses gobernantes y tomó como suya la ciudad.
Esta ciudad tiene un extraño aire de fantasía urbana y la obra de Gladstone esta sembrada de conceptos complicados más propios de la ciencia ficción especulativa, algo que de nuevo sitúa esta novela en un lugar único.
UNA CIUDAD EN EL DESIERTO Y PLANES URBANÍSTICOS
La novela nos sitúa en Dressidiel Lex, cuarenta años después de una guerra en la que el Rey de Rojo y los hechiceros lograron derrotar y asesinar a los dioses, tomando la ciudad. Desde entonces, gobierna la ciudad y trata de modernizarla.
El argumento gira entorno a una zona de la ciudad, el Skittersill. Este suburbio pertenecía a los elegidos para ser sacrificados a los dioses. Los sellos que los antiguos dioses crearon para protegerla se marchitan y los nuevos gobernantes quieren renovar la zona. El Rey de Rojo y Tan Batac tienen nuevos planes urbanísticos a los que se opone la población de la zona.
Aquí es donde entra Elayna, hechicera y heroína de las viejas guerras. Actúa como abogada, presentando un plan de renovación para los sellos del Skittersill. Ella logra convencer al Rey de Rojo y a Tan Batac de que negocien con los habitantes que, reunidos en la Plaza Chacal, se niegan al cambio.
UNA REVOLUCIÓN Y MUCHOS INTERESES EN JUEGO
En la plaza se reúnen los habitantes del Skittersill. Están acampados en señal de protesta y liderados por Temoc, un gigante con la piel llena de tatuajes, el último Caballero Águila, que trata de mantener la esperanza de sus conciudadanos. Con los dioses muertos o dormidos, sus rituales han perdido fuerza, pero su voluntad no decae ni una pizca.
El intento de Elayne de que las partes se reúnan y negocien los términos de la renovación de los sellos parece ir bien, pero como es de esperar, todo se torcerá en un momento.
Desde la plaza se gestará primero una defensa y más tarde una revolución. Desde las sombras, facciones enfrentadas utilizarán a la gente del Skittersill para llevar a cabo sus propias venganzas, provocando una revolución que terminará en un sangriento enfrentamiento entre los revolucionarios, dirigidos por el propio Temoc y las tropas de el Rey de Rojo, implacables e infinitamente más poderosas.
UNA HISTORIA COMPLEJA
La historia tarda un buen rato en arrancar. El primer cuarto del libro es denso, repleto de información política, geográfica y personal. Casi te obliga a leer dos veces para entender qué está pasando. En este punto parece que para Gladstone la historia es secundaria, solo le importa ofrecer información detallada.
El problema de esta primera parte es que se hace tediosa. Los dos protagonistas, Temoc y Elayne, no terminan de agradar y, con tanta información por página, resulta complicado seguir el hilo.
Temoc y Elayne forman dos caras de una misma moneda. Viejos enemigos, pues se vieron las caras en las Guerras, donde la hechicera le salvó la vida, tienen personalidades muy parecidas, aunque en lugares opuestos. Ella parece saberlo todo y adelantarse a todo, es estrictamente profesional y jamás se sale del guión que le marca su trabajo. Él, en cambio, parece incapaz de tomar una buena decisión en todo el libro.
Por suerte, una vez arranca la revolución, da la sensación de que Gladstone recupera la pasión por ella y todo empieza a funcionar mejor. Las batallas por la Plaza Chacal son espectaculares y el autor nos ofrece mucha información sobre cómo funciona la magia en su mundo, un sistema extremadamente complejo de sellos y enlaces.
La prosa de Gladstone, aunque pesada al principio, se convierte aquí en una lectura ágil y cómoda. Muy divertida, con unos capítulos finales que enganchan al lector y no lo sueltan.
MÁS QUE FANTASÍA
La Primera y la última nieve es un libro sobre relaciones, en el más filosófico de los sentidos. Nos habla sobre la fe y las distintas formas de entenderla, sobre el dinero, la fidelidad y el amor. También sobre la revolución y la gentrificación, ese fenómeno tan de moda que tiene que ver con la recuperación de los barrios en mal estado.
Nos habla sobre las consecuencias de la guerra, sobre ese día después, cómo los vencidos conviven con los vencedores. Los dioses han sido expulsados de la ciudad. Temoc tiene prohibido realizar sacrificios, con el pacto de fe roto, los dioses duermen, débiles y olvidados.
Un libro que merece la pena ser leído, pues nos habla de problemas cotidianos.