Título: Los dioses muertos (Canto de Prometeo)
Autor: José Antonio Fideu Martínez
Editorial: El Transbordador
Año de edición: 2020
Extensión: 360 páginas
Encuadernación: Tapa rústica con solapas
PVP: 26,00 € (papel) / 5,90 € (ebook)
INTRODUCCIÓN
Ediciones El Transbordador y José Antonio Fideu Martínez, quien participa con un relato inédito en nuestro número 11, nos traen Los dioses muertos (Canto de Prometeo). El autor mezcla ingredientes de epopeya griega, fantasía y ciencia ficción para narrar la historia de Prometeo, el héroe más grande de Grecia caído en desgracia ante los dioses.
ANÁLISIS
Los dioses muertos empieza por el final. Como lectores, somos testigos de la reunión de Cleón, el narrador, con su admirado Prometeo. No sabemos quiénes son, solo que han pasado de ser considerados héroes a traidores por algún capricho de los dioses olímpicos. Y, solo con eso, Fideu ya nos ha enganchado.
Cleón comienza entonces a narrar la historia de Prometeo, a la que la suya propia está íntimamente ligada. Bien porque el propio narrador es partícipe en los hechos, testigo de ellos o porque Prometeo le ha encomendado la tarea de narrar su particular odisea, asistimos al ascenso del héroe hasta convertirse en favorito de Atenea y a su posterior desgracia.
En este punto, debo detenerme en los personajes. Por un lado está Cleón, fiel amigo del gran héroe y narrador subjetivo. Se trata de un personaje al que odiar por momentos, pero a quien se le acaba cogiendo cariño. Por otro lado, tenemos a la sabia Pandora, que actúa como mentora y representa el pensamiento crítico. Y, por supuesto, Prometeo, protagonista absoluto y héroe sin tacha siempre al servicio de la causa que cree más justa. A ellos se añade una plétora de secundarios con mayor o menor peso en la trama, pero igual de ricos en matices que los protagonistas.
Poco a poco, conocemos una Grecia que se asemeja a un Edén bíblico, pero, sin saber muy bien el qué, percibimos algo retorcido en su perfección. Igual que los personajes de la novela, intuimos que existe una verdad oculta tras un velo que los dioses no quieren destapar. A medida que la trama avanza, nos desvela más y más detalles de esa verdad.

José Antonio Fideu.
Esto se percibe también en el propio género de la obra, que al principio parece pura fantasía, pero cada vez introduce más elementos de ciencia ficción, e incluso del subgénero de Tierra moribunda. Todo ello adornado con un tono general de epopeya griega y un estilo cinematográfico especialmente presente en las batallas épicas.
Por último, hay que destacar que en Los dioses muertos (Canto de Prometeo) todo tiene un porqué. Elementos que en un principio podrían parecer cosméticos están ahí por alguna razón, tarde o temprano influirán en la historia. José Antonio Fideu no ha dejado ningún cabo suelto.
LOS DIOSES MUERTOS (CANTO DE PROMETEO): CONCLUSIÓN
Los dioses muertos (Canto de Prometeo) es una novela excelente. Si te gustan la mitología, las combinaciones de diferentes géneros y las sorpresas, no deberías dejarla escapar. Un ejemplo perfecto de cómo inspirarse en relatos clásicos y darles una vuelta de tuerca para adaptarlos a las corrientes literarias de nuestra época.
Por cierto, en el blog del autor hay una serie de interesantísimos artículos sobre el proceso de creación de esta obra, que van desde los mitos presentes en la novela hasta la sexualidad en la Antigua Grecia.